Songs

domingo, 30 de agosto de 2015

Veneramos al dios de la vida, al dios del amor, de guerra, de la abundancia;
hacemos altares, creamos imágenes, santificamos lugares, pedimos perdón, nos hacemos santos,
héroes, mártires, soldados, generales, amantes, prostitutas, payasos, mendigos, en socios, amigos,...
Nos convertimos en todo aquello que creemos pueda salvarnos.
Salvarnos de qué?
El verdadero loco, el demente incurable es aquel que quiere transmitir su locura,
porque no la reconoce como tal.
Los ebrios de conocimiento juegan a la ruleta rusa con las emociones, y venden sentimientos envasados y dosificados
a dos comprimidos cada 8 horas.
Miro el agua correr, y tras tanto mirarla, me dejo llevar por la corriente que me arrastra en la mirada con el movimiento vacío del destino.
Miro y cuando no veo, me pregunto por qué tanto silencio.
En paz con todos los muertos ahora estoy. En paz para perdonar y ser perdonado.
A lo lejos el bullicio de muchas voces; risas, gritos, cánticos,...sin el suficiente momento de silencio como para darse cuenta
de lo que están haciendo y diciendo.
Pero es un tiempo para la humanidad, en que a la hora de dormir, es nuestro deber llegar cansados para no pensar, y dejarnos llevar.
Dejarnos llevar.

A. Jose Maria Pintos.

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