Sé que la muerte me espera
escondida, oculta, agazapada
en algún momento y algún lugar.
Tal vez esperando sorprenderme.
Pero casi no pienso en ella.
Si de todos modos ese día
en ese lugar estaremos cara a cara
y no podré decir nada.
Nada que cambie las cosas.
Y nada que me haga odiarla,
pues cuando nací
firme el compromiso
de vivir para alguna vez morir.

A. Jose Maria Pintos.